CADA DETALLE HA SIDO PENSADO, diseñado e implementado para Solace Hotel Santiago. Lejos de tomar decisiones al azar, aquí el concepto es que todo tiene una historia que contar, un trasfondo que hace que la estadía de los huéspedes sea una experiencia única. Y qué más enriquecedor que saber que en el hotel en que te hospedas, existen elementos tan exclusivos como obras originales de Philippe Starck, un diseñador industrial francés reconocido mundialmente por la funcionalidad y la estética de sus creaciones. “En hotelería, cuando viajas a Nueva York y te quedas en un lugar ambientado por Philippe Starck, tienes que pagar precios altísimos por ese lujo. Nosotros acá tenemos muchos elementos de él, pero no traspasamos eso a la tarifa de nuestros clientes, sino que buscamos que el huésped lo distinga, lo sepa apreciar y que nosotros podamos mostrarlo al mundo”, dice Milena Tang, gerente de operaciones de Solace Hotel Santiago.

Además del destacado trabajo de Starck, el equipo de ambientación incorporó piezas de Piero Lissoni, Ferruccio Laviani, Michele De Lucchi, Antonio Citterio, Mattheo Thun, Piergiorgio Cazzaniga y Tom Dixon, detalles reflejados en los distintos espacios que lograron unificarse para dar una personalidad única al hotel, un encanto que busca ofrecer al huésped un ambiente cálido y vanguardista.

UN NEGOCIO CON PERSONALIDAD

La empresa creadora del interiorismo fue BMA Arquitectos & Asociados, compañía argentina a cargo de grandes proyectos a nivel latinoamericano, responsable de todos los detalles: colores, alfombra, papel mural, elección del mobiliario, etc., como también la elección de diseñadores internacionales. “Lo importante es que cada elemento tiene una historia que contar, no fue escogido sólo porque es bonito. En base a eso trabajamos fuerte en un programa de inducción, para que todo nuestro personal pueda contar esta historia. La idea es que si un huésped pregunta por una silla, por ejemplo, o comenta que le gusta, le podamos decir quién la diseñó, de dónde viene, si tiene premios, si ha sido exhibida en algún museo, etc. Esto nos da un tema de conversación, y hace que la estadía de nuestros clientes sea una experiencia distinta”, explica la gerente.

La iluminación es un mundo distinto en este hotel, trabajo que estuvo a cargo del estudio de Fernando Piedrabuena, profesional argentino famoso por haber estado en el mundo del espectáculo y trabajado con los más importantes artistas de ese país, como Mercedes Sosa, Fito Páez, Charly García, Pedro Aznar, entre muchos otros. Esta labor se puede apreciar en el lobby, pasando por las habitaciones, el restaurante y otros rincones que dan vida al hotel, en especial si es de noche.

La intención es dar personalidad propia a Solace Hotel Santiago, que comenzó hace ocho años en Puerto Varas con su primera propuesta, en una ciudad que se proyectaba como uno de los mejores destinos para la hotelería en nuestro país. No se equivocaron. Hoy Solace Hotel Puerto Varas es dueño de una excelente reputación y la preferencia de muchos turistas que disfrutan de esa localidad. Actualmente Providencia se convierte en el segundo hotel del grupo de inversionistas que busca dar a cada construcción un único denominador común, que es ser fiel a su entorno.    

Sorpresa: pecho de cerdo marinado con moscatel y vainilla francesa, cocción en baja temperatura por 12 horas, crema de coliflor con hojas y flores de tomillo, y papas salteadas con aceite de trufa negra ($8.900)

Zafferano: filete de salmón confitado a 60° en técnica sous vide, verduras y aceitunas salteadas con sésamo, especias y menta, escabeche de limón y salsa de azafrán ($8.700)

Revolución: crema de queso con frutos rojos, y galleta de mantequilla a la semilla de amapola ($3.800)

DE CHILE PARA EL MUNDO

Pensando en un cliente ejecutivo, los encargados decidieron ofrecer las comodidades necesarias para un mundo de negocios. Con este objetivo mantiene disponible tres tipos de habitaciones: Superior Twin, Superior King y Suite, 108 en total, todas con wi-fi, área de trabajo, caja de seguridad, TV Led de 47’’, café y mini bar de cortesía, sin posibilidad de camas adicionales ni habitaciones conectadas.

Pero quien busca este tipo de productos es más bien el turista extranjero, y por eso en Solace quieren dar a conocer de forma sofisticada lo mejor de nuestro país. “El hotel está diseñado pensando en cómo mostrar un país distinto al cliente que nos visita, un Chile más profundo. Por ejemplo, en los distintos espacios tenemos fotografías de paisajes nacionales, pero no son las típicas, tienen otra mirada. Si vamos a mostrar las Torres del Paine, las mostramos de un ángulo en que la persona las pueda conocer de manera especial. Además hacemos una georreferenciación por si quieren viajar hasta ese lugar”, señala Tang.

Si bien los elementos decorativos arribaron en su mayoría desde el extranjero, los materiales buscan representar nuestra cultura. Mucha madera y sobre todo cobre, son protagonistas dentro de la ambientación del hotel. “La materia prima es nacional, el equipo de interiorismo trabajó desarrollando cada detalle, incorporando distintas maderas típicas chilenas en varios espacios del hotel. Destaca el jardín vertical que ofrece una fresca sensación de relajo en medio de la agitada vida urbana. Se trata de un muro fabricado únicamente con helechos nativos…eso nos distingue”, dice la gerente.

Mediterráneo: bocado de atún fresco, marinado con salsa de soya y miel, lámina de pepino, salsa de yogurt y hojas verdes ($10.000)

Legumbres & Cereales: hamburguesa de lenteja con amaranto, lechuga, pan pita, tomates cocteles asados y confitados, mousse de pepino con crema de soya y menta, cebolla morada caramelizada, queso de soya fermentado y tostado en miel, y un clásico y cremoso humus ($6.200)

Blanco & Rojo: mozzarella de búfala campana, crema de tomates sunrise tibia, aceitunas negras, prosciutto crudo de parma de 14 meses, rúcula, ensalada de tomate cereza asado, berenjena y alcaparras sicilianas ($14.500)

Clásico v/s Presente: ossobuco cocinado al vacío estilo milanese, con su gremolada, servido con gnocchi de papa al azafrán, crema de gorgonzola y concentrado de carne con vino merlot ($8.300)

MEDITERRÁNEO NACIONAL

Otra área que busca destacar los productos locales es la cocina a cargo del chef italiano Gionata Nardone. El hotel buscó una propuesta adecuada pensando en sus pasajeros, pero también en su entorno, en un país que tiene mucho que ofrecer en cuanto a materias primas y sabores que recorren de norte a sur. “Nuestro estilo es mediterráneo, enfocado a pescados y mariscos. Quisimos rescatar productos locales, pero buscando los que unen a los 22 países bañados por el Mar Mediterráneo, y con esa base se empezó a armar el menú. Existe una gran variedad de ingredientes sanos con los que pudimos hacer recetas muy buenas”, cuenta Nardone.

La idea fue desarrollada para Zafferano, el restaurante principal del hotel, lugar donde los huéspedes toman desayuno y además pueden almorzar y cenar. Con capacidad para 70 personas, más 12 en la terraza, se ubica en el piso principal. Es un espacio moderno, que muchas veces termina convirtiéndose en la prolongación de una oficina para huéspedes que comienzan la jornada trabajando, o haciendo reuniones a primera hora de la mañana.

Inocencia: paleta de crema de leche con amarena, y guinda silvestre italiana ($4.000)

Después de mucho trabajo, la actual carta que refleja fielmente el estilo del chef que por nueve años estuvo a  cargo de la cocina de hoteles y casinos Enjoy, hoy desea transmitir las bondades de los productos chilenos, pero también todas las ventajas de una dieta que invoca sabores de Europa, Asia y África. “Me encanta la cocina mediterránea, es equilibrada, sin grasas saturadas, no es nociva, y si la regularizas bien, es una dieta perfecta. Quise trabajar con esta base porque hicimos un estudio y vimos muchas aperturas de restaurantes italianos en los últimos años en Santiago, según lo que pude ver. Donde existe más oferta es en comida peruana, italiana y sushi, entonces quise hacer algo diferente. Otro factor importante fue enfocarnos en un público ejecutivo extranjero, y me pareció ideal este concepto para mostrar de buena manera los productos nacionales de forma más amigable”, explica el chef.

Con esta base creó una carta que incluye entradas, ensaladas, platos principales, postres, menú verde, vinos nacionales y espumantes, y una cuidadosa selección de aguas. Una gran variedad donde destacan las hierbas aromáticas, aceite de oliva, cocina al vacío, verduras frescas, y por supuesto los más sabrosos productos del mar chileno.

Otro espacio gastronómico es Views Bar. Ubicado en la azotea de Solace Hotel, ofrece un ambiente exclusivo con una hermosa vista a Providencia, y cerca de 35 cocktails vanguardistas de autor y otros clásicos para el público más tradicional.

Por ultimo está Lobby Bar, un confortable espacio ubicado junto a la recepción, donde los pasajeros y clientes externos pueden disfrutar de un buen café, comida ligera, incluso un trago luego de las horas de trabajo, ya que también ofrece una selección de alrededor de 22 cocktails para todos los gustos. “Sin grandes pretensiones queremos cumplir con nuestro público, y que nos conozcan por tener una buena comida, buen producto y licores premium”, concluye Gionata Nardone.

Con estas características, Solace Santiago busca ser un hotel sencillo, fácil de conocer para el visitante pero con un servicio de primer nivel. Esta sin duda es la mejor manera de mostrar nuestro país al huésped extranjero.