Nuevas oportunidades, nuevas ocasiones y la mejor experiencia es lo que promete Heineken 0,0. Sea durante una reunión, un almuerzo, antes de hacer ejercicio, en la casa o una fiesta, Heineken llega a nuestro país con su nueva cerveza desalcoholizada para unirse a una tendencia que va en aumento y que cada día integra nuevos actores en el mercado.

Con la entrada en vigencia de la ley “Tolerancia Cero” el año 2012, el consumo de cervezas sin alcohol comenzó a despegar a un ritmo acelerado. Luego, la “Ley Emilia”, activa desde el 2014, reforzó esta tendencia que ha obligado a los conductores a dejar sus medios de transporte a un lado si la idea es consumir algún grado alcohólico. De esta manera el mercado ha explicado, en gran medida, el aumento de hasta ocho veces del consumo de bebidas con menos grados de alcohol. Así, si durante el 2011 se consumían 600 mil litros de este tipo de cerveza, el 2016 esta cifra alcanzó los 5,1 millones de litros.

Sin embargo, este no es el único factor relevante al momento de determinar el porqué del aumento de las cervezas sin alcohol. El cuidado de la salud y la sensación de sabor de una Heineken en el momento que se estime conveniente, ha ganado cada vez más adeptos en el mercado chileno. Por esto la marca de cerveza holandesa, luego de dos años de arduo trabajo, logró lo presentar su primera cerveza 0,0 alcohol, manteniendo su característica esencia, frescura y sabor.

Heineken, atento a nuevas oportunidades, logró observar que este segmento podría jugar un rol competitivo a largo plazo dado que se prevé que su crecimiento continúe acelerándose al menos hasta el 2021, llegando en ventas a los 8,7 millones de litros, cifra que representa un alza de 70,5% con respecto a las compras registradas en 2016. Bajo este escenario, optó por ampliar su portafolio con la Heineken 0,0 que, además de mantener el sabor de la original, cuenta con numerosas propiedades como ser 100% natural, bajo en contenido calórico y elaborada con su propia levadura tipo A.

En cuanto al proceso de elaboración, es casi idéntico que al de la original. Como particularidad, este proceso dura 28 días (es el más largo en las cervezas de su categoría) y fermenta en tanques horizontales. Luego, se le elimina cuidadosamente el alcohol mediante un proceso natural, no se le añaden aditivos, por lo que logra mantener ese sabor afrutado con ligeras notas de malta