EL INTERNADO

27 Mayo 2016. 2154 impresiones

Mucho más que un restaurante

Manteniendo un estilo respetuoso de la arquitectura patrimonial de Valparaíso, el local suma una sustanciosa carta, sala de exposiciones y cine, una radio ya en funcionamiento y una tienda de souvenirs, entre otras novedades.

Mucho más que un restaurante

A todo nivel ha sido la apertura de este nuevo local en Valparaíso, que manteniendo el estilo de diseño respetuoso de la arquitectura patrimonial del puerto de su vecino y asociado Hotel Fauna, suma a la sustanciosa carta a cargo de la chef Gisella Caselli una sala de exposiciones y cine, una radio ya en funcionamiento y una tienda de souvenirs, entre otras novedades.

Texto: Maureen Berger | Fotografías: Gonzalo Carrasco

Todo hacía presagiar que El Internado la iba a romper en Valparaíso. El éxito del Hotel Fauna y su restaurant, de propiedad de los mismos dueños, Tomás Elizalde, restaurador, y los arquitectos Roberto Fantuzzi y Jaime Rodillo, se replicó en este centro que nació en Cerro Alegre para aportar en materia gastronómica y cultural.

El Internado se inauguró el 1° de noviembre de 2015, con una muestra de fotografía enmarcada dentro del Festival Internacional de Fotografía de Valparaíso (FIFV). “Fue una apertura muy dinámica, con el carácter cultural que estamos buscando imprimirle a este lugar. Inaugurar con un festival tan connotado sirvió para darnos a conocer, para recibir un feedback de nuestros primeros clientes. Ellos se vieron entusiasmados por las instalaciones y el perfil de El Internado, orientado a que todos imaginemos qué queremos que suceda en este lugar”, recordó Pedro Gahona, administrador.

Al ser consultado el por qué del nombre, explicó: “Esta casa que tiene mucha historia fue construida en 1880. Cuando estaba en obras de reconstrucción, se acercó una señora para contar que durante la década del ‘50, ‘60 y ‘70 había funcionado aquí un internado de señoritas que venían del interior. Dijo que había un piano y que muchos parroquianos pululaban el barrio para pololearse a las chiquillas”. Sobre la ubicación, frente al Hotel Fauna, indicó que el pasaje Dimalow es estratégico en Cerro Alegre, “estamos en el polo turístico más importante de la región, en el centro histórico de la ciudad y a pasos del centro urbano. Digamos que se dio…de alguna manera los lugares llegan a uno”. Cabe acotar que el inmueble está justo entre Dimalow y el pasaje Caracoles, por ende tiene dos accesos, lo que aporta al turismo y a la habitual concurrencia de clientes desde ambas aristas.

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El Internado se compone de dos pisos y un subterráneo, y según el administrador, toda la casona se ocupa como espacio destinado a la gestión cultural y creativa de Valparaíso. De abajo hacia arriba, el subterráneo se caracteriza por tener una rotación de actividades culturales y de exhibición de muestras gráficas. La temporada se realiza en una sala acondicionada especialmente para la ocasión, un ciclo de microcine alternativo llamado Insomnia cada miércoles, con funciones a las 19:00 y 21:00 horas por $2.000. Al mismo tiempo hay una muestra fotográfica de Reinhardt Schulz: “Cuando los barcos retornan a tierra”, que muestra una serie de fotografías relacionadas con el mar y con Valparaíso. Abajo también está la “Radio sin pasaporte” (de emisión online), que comanda el comunicador y musicólogo Ronald Smith. “Se inauguró el 21 de abril y tiene como fin llegar a ser un medio de comunicación potente, en donde la creatividad es parte fundamental de este proceso”.

El primer piso presenta una tienda con diversos souvenirs y artículos decorativos. Al frente está el salón de juegos con mesa de billar y una máquina antigua pero operativa de flypper firepower (4 fichas por $1.000), “que generan mucho interés ya que te llevan al pasado instantáneamente. Para niños, juegos como tal no tenemos, pero sí se pasean por las mesas algunos juguetes, un dinosaurio, una pequeña grúa, los cuales entretienen a los pequeños”, complementó Pedro. Destaca en esta gran planta la cocina abierta integrada con la barra, que fusiona el salón con lo demás. “Al ser abierta muestra transparencia en la producción. Se ven todos los procesos, desde la fabricación hasta cuando están listas para servir”. El segundo piso, que es más alto, “tiene una apuesta más que interesante, ya que a diferencia de muchos locales optamos por una vista hacia los cerros, poco valorada en general, pero que destaca lo que es la ciudad, la vida en los cerros de Valparaíso, la configuración de las calles, la arquitectura de las casas…muestra la ciudad tal como es”, puntualizó Gahona. En este piso hay además una exposición permanente de fotografías de elementos antiguos, hallados en una casa del Cerro Cárcel por Tomás Elizalde, restaurador y dueño.

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Sobre la arquitectura y diseño de ambiente de la casona hubo un estudio interesante. La propuesta se basó en la intervención de este inmueble patrimonial de 1880 para albergar un programa de uso múltiple, “como el uso anterior de la casa era un internado de señoritas requería estar subdividido en muchos espacios, por eso dejamos los vestigios que se aprecian en el techo de cómo eran las divisiones de la casona antigua. Hoy esa estructura/uso se modificó para tener grandes espacios, salones amplios. Además se incorporó un patio de luz que atraviesa los dos pisos y el subterráneo, dando luz y ventilación natural a todo el edificio”. Así, el diseño se basa en mantener y mostrar los materiales originales de construcción tal cual son: la escalera original de la casa, la roca en los muros y las vigas, junto al uso de materiales nuevos y mobiliario acorde (sillones de look retro, lámparas industriales y sillas, mesas más modernas), lo que genera una convivencia entre lo antiguo y lo nuevo.

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SABORES EN LA CARTA

En El Internado la cocina está a cargo de la misma chef de Fauna, Gisella Caselli. Con una gran barra y cocina a la vista, ofrece sandwichs, hamburguesas con toques chilenos y creativos. Ella estudió gastronomía en Inacap Santiago e hizo su práctica en el Hotel Hilton de Cancún, México. Mientras estudiaba inglés trabajó en banquetería para poder viajar a Georgia, Estados Unidos. Allí, en el Club House del Resort de Golf Reynods Plantation, además de especializarse en cocina southern, aprendió una línea más gourmet con toques asiáticos de Japón y Tailandia. Posteriormente, en Oxford, Inglaterra, trabajó en el hotel Oxford Spires Four Pillars, y en el pub The Globe de esa misma ciudad. También estuvo en el O’Brien’s of Brentford de Londres, un pub donde aprendió gastronomía inglesa con toques de la India. Después de esa experiencia viajó a las islas de Scilly (Sorlingas) para integrar el equipo del hotel Hell Bay, en la Isla Bhryer, donde trabajó con productos del mar. En 2007 volvió a Chile para abrir su propia empresa: Voilà Banquetería, y trabajar en algunos restaurants de Viña del Mar. A fines de 2008 ingresó al Via Via Café donde se quedó tres años, hasta que en 2012 la gente de Fauna la tentó, aceptando sumarse a su propuesta gastronómica. Desde el 2016 tiene a su cargo la cocina de El Internado, donde trabaja junto a un afiatado equipo, cuyo sous chef es Cristian Manríquez.

“La carta se modifica en base a la temporada, pero al ser nuevos, para nosotros fue siempre un testeo, nos basamos en las críticas de nuestros comensales y en las sugerencias que nos realizan para ir cambiándola. La base es la misma, pero hemos realizado cambios en platos puntuales y en ingredientes. Por ejemplo, nuestra Hamburguesa Internado ahora la tenemos rellena de queso mozzarella y cheedar; también tenemos la Hamburguesa Presumida, que es de quínoa; o una que recomiendo bastante, la Rebelde, con un chutney de arándanos y queso azul”, explicó la chef.

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Otras alternativas de la carta son las tapas ($2.800 a $12.000), entre las que destacan el Tártaro de filete; Camarones en chimichurri; Albóndigas de la abuela, en su jugo, con salsa criolla y queso derretido; o Bola blanca, alitas de pollo asadas en salsa barbecue, con bastones de apio y salsa de queso azul. En platos ($7.500 a $9.400), Entraña atrevida, entraña a la pimienta con cebollas caramelizadas y papa rellena con champiñones, tomate deshidratado, tocino y parmesano; Vegetariano insolente y Pescado Internado, pescado del día con pebre y mango, y puré de arvejas con tocino crocante.

Uno de sus plus son las hamburguesas caseras con carne cien por ciento Angus, que incluye papas rústicas y coleslaw ($4.900 a $6.900), como por ejemplo la Hamburguesa Internado; la Rebelde, de vacuno con chutney de arándanos, queso azul y rúcula fresca; la Caprichosa, de vacuno con queso camembert, champiñones, huevo frito y tomate caramelizado; y la Hamburguesa presumida, que es vegetariana. También hay sandwichs en pan miga ($2.600 a $3.200), como el Bola 8, de huevo duro con lactonesa y aceitunas negras; el Bola roja, con jamón elaborado en casa y queso caliente; y Sandwich buchaca, con pollo lactonesa y palta ($3.200)

En cuanto a ensaladas ($3.500 a $6.500), está la Alegre con mix verde, tomate cherry, almendras al ajo, zeste de naranjas, queso de cabra, palta y alfalfa con opciones de agregado (camarones, pulpo crujiente, pollo a la plancha o lomo liso); y la César.

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En los postres ($2.800 a $3.800) llama la atención el Brownie mantequilla de maní; Milhojas de manzana, con helado de carménère y crema de vainilla; el Cheesecake de vainilla, con salsa de frutos rojos; y los Helados artesanales con salsa de chocolate.

La barra ofrece variadas cervezas, como la Szot, de Quilpué ($2.800); y muchos cocteles como el Internado sour, pisco con jugo de naranja, jugo de limón y miel ($3.000); también el Pisco jager, pisco, coca cola y jagermeister ($4.000); y jugos de fruta natural, como el de Frutilla albahaca o Piña naranja menta ($2.500).

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Un hecho importante es que El Internado obtuvo un fondo Corfo en el plan de Industrias Creativas. “En ese contexto estamos desarrollando tres principales ejes creativos. El primero es la tienda El Internado, en donde buscamos potenciar el diseño creativo chileno con diversas ofertas de productos locales: papelería, ilustración, productos y editoriales. Ha sido una gran apuesta con muy buena recepción de la gente. El segundo punto es nuestra galería, que está en el subterráneo, destinada a recibir artistas que manejen una línea ad hoc a nuestro local. Y en tercer lugar está la ‘Radio sin pasaporte’, ya descrita”, indicó finalmente Pedro Gahona.