LA JOYA HOSTEL
Con una propuesta europea, este La joya Hostel en Valparaíso une elementos y formatos de alojamiento de una manera vanguardista y juvenil. Cómodas habitaciones para una persona, dos, y hasta grupos, un buen servicio y un ondero restaurant y sanguchería son parte de su interesante oferta.
“WE ARE WORKING TO BE THE BEST HOSTEL IN SOUTH AMERICA”, se lee en los escalones de acceso a La Joya Hostel, una apuesta ambiciosa que todo el equipo involucrado tiene en mente conseguir…y lo demuestra en cada detalle. Su dueña, Elizabeth Pusic, no es del rubro hotelero, sin embargo supo asesorarse de jóvenes creativos que la ayudaron a conectar su idea con un público objetivo.
Ubicado en Pasaje Quillota 80, pleno Barrio Almendral de Valparaíso, casa donde vivió Elizabeth con su marido por cinco años, mientras ella estaba a cargo de la cadena de lavasecos Océano, y él de la panadería Erro, un terrible incendio destruyó todo. La pérdida fue total. De a poco fueron reacondicionando el espacio, hasta que se encontraron con un proyecto presentado por el arquitecto Michael Behr. A ello se sumó el regreso desde Santiago de su hijo Esteban Oroz, quien había estudiado ingeniería comercial, y su compañero y amigo Leonardo Zúñiga, con quienes formaron equipo. Adaptaron los espacios y levantaron un hostel para backpackers, turistas extranjeros y nacionales.
Abierto hace poco más de un año tras un intenso trabajo, hoy ofrecen 18 habitaciones que pueden hospedar a 60 personas. La ambientación es similar a un garage industrial del puerto, y los detalles vintage: mobiliario y artefactos antiguos – escritorio, radios, televisores –, lámparas industriales, más algunos elementos marinos, como las cuerdas, le dan un toque porteño tipo “Joya del Pacífico”, como se denomina al mítico Valparaíso.
EXPERIENCIA JOYA
A los pies del emblemático cerro Barón, La Joya Hostel se emplaza en un sector diferente a otros alojamientos de la ciudad y solo a cuatro cuadras del terminal de buses. “Hemos diseñado este lugar pensando en el viajero contemporáneo, preocupándonos de cada detalle, con un sello propio y diferenciador. Porque la esencia de un viaje está en los lugares y las personas, por eso invitamos a los huéspedes a vivir la experiencia Joya”, explica Elizabeth, quien destaca que el equipo está conectado e interactuando siempre con las personas, ya sea con información u organizando actividades para ellos.
“Ofrecemos un lugar increíble, modernidad, diseño y confort y un toque vanguardista, se unen en un mismo concepto, con más de 1.000 metros cuadrados para disfrutar”, dice Leo Zúñiga, director creativo del hostel.
HABITACIONES
La Joya Hostel ofrece distintos tipos de habitaciones, para que los huéspedes puedan elegir según sus necesidades. “Parejas, grupos de amigos, aventureros, emprendedores jóvenes y estudiantes, todos son bienvenidos”, afirma Esteban Oroz, socio del emprendimiento, quien añade que “para quienes viajan por trabajo, o son aventureros solitarios, este es el lugar ideal. Hay habitaciones tipo loft, de dos niveles, que ofrecen completa privacidad, no hay problemas para el libre uso de wi-fi, y cuentan con una estación de trabajo dentro de la habitación. Hay baño privado, toallas, amenities, y Led TV cable”. Para las parejas hay habitaciones dobles, con similares características, más calefacción y frigobar.
“Tenemos la habitación que necesitan para las escapadas con amigos a Valparaíso. El concepto: un pequeño departamento para compartir”, indica Elizabeth. También cuentan con literas en dormitorios mixtos, masculinos y femeninos, lockers, custodia de equipaje y cocina equipada. Esta última la usan algunos pasajeros que optan por comprar y preparar sus propios alimentos. Incluso en la terraza pueden hacer uso del bar, y asados en la parrilla siempre dispuesta. En cuanto al desayuno, es tipo buffet, se ofrece todos los días con pan recién horneado, tal como la repostería (brownies, merengues y otros), jugo de frutas, yogurt con semillas, cereales, queso, jamón, etc.
SANGUCHERÍA
Otra novedad es que hace algunos meses se aventuraron con la apertura de La Joya Cantina y Sánguches, conectados internamente con el hostel pero también con acceso desde la calle. “Somos un restorán especializado en la preparación de tragos y sánguches. Nos hemos inspirado en la cultura y estética propia del viejo puerto, para que los clientes se embarquen en un viaje de sabores y recuerdos”, cuenta Esteban Silva, administrador, quien agrega que existe un salón principal con una barra de bar, arriba una amplia terraza con vista a la ciudad, otra sala con barra y juegos de salón (mesa de ping pong y pac-man).
La chef, Manuela Benítez, señala que “nos caracterizamos por preferir proveedores locales, poniendo énfasis en la calidad y frescura de los productos”. La profesional estudió en el Instituto Argentino de Gastronomía, en Buenos Aires, donde se quedó tres años. En Chile trabajó en el Hotel Fauna y en El Internado, antes de llegar a La Joya.
En la carta de sánguches, todos con pan de la casa, figura La Baronesa; Chacarero don Berna, con lomo en su punto, tomate fresco, porotos verdes y ají encurtido; Joya poché, filetes de pollo grillado, tomate, palta, lechuga, huevo poché y mayo Joya; Pancho cheddar, hamburguesas de la casa, cheddar y pepinillos Joya; Chanchita BBQ, con pan de la casa, cerdo BBQ La Joya, pepinillos y honeymustard; Carvallo (vegetariano), croqueta de zapallo camote, rellena de queso mantecoso, apanada en cereales de maíz, vegetales asados, rúcula y tzatziki; La sharp (vegetariano), hamburguesa de porotos, queso de cabra, hummus, manzana verde, cebolla caramelizada y rúcula. En cuanto al pan batido hay Caserita del cardonal; Mechada italiana; Porteña buena moza, mechada de la casa y cremosa pastelera (puré de choclo seleccionado); y Del maestro, una inspiración diaria del maestro sanguchero ($6.000).
En ensaladas hay Pollo camarón, Mix de hojas verdes de la estación, Camarones al ajillo, Filete de pollo grillado; y delicados rolls de salmón ahumado y queso crema saborizado, entre otras ($4.800 a $7.900). Entre las opciones para “picotear”: Papas Joya, papas fritas estilo casero, crocantes por fuera, suaves por dentro, acompañadas de la clásica mayo Joya para untar o la Tabla territorio, mini chorrillana de entraña, pollo thai y cerdo BBQ ($4.500 a $11.500). Y en postres el Crumble ($3.000), con helado, crumble de manzana y helado casero de vainilla ($3.000).
Dentro de los tragos destacados por la bartender Schlomith Momberg se encuentra el Joya sour; Morir con honor, whisky, café, naranja y canela; Francis Drake, ron, limón sutil, crema de coco y menta (frozen); Chica del 79, cachaza, limón sutil, miel y jengibre (frozen); y Clandestino ($3.500 a $5.000). La carta de cervezas está compuesta por cerveza artesanal desde una barra móvil y en botella en versiones(mesa de ping pong y pac-man). American Pale Ale, Deutsches Alt Bier, Irish Dry Stout, Belgian Strong Ale ($2.900). También hay tragos especiales, además de jugos: Citrus, Mango alegre y Limonada menta frambuesa ($2.000 a $3.000). Entre los imperdibles están las jarras ($7.000): Aníbal Tinto, vino tinto, albahaca y frambuesas; y La bogatuna, chardonnay, chirimoya y naranja.
La Joya Hostel
- Pasaje Quillota 80, Valparaíso
- Teléfonos: (+56-32) 335 6606 - (+56-9) 7217 4674
- info@lajoyahostel.com
- www.lajoyahostel.com
La Joya Cantina y Sánguches
- Eusebio Lillo 200 esquina pasaje Quillota, Valparaíso
- Horarios:
- Lunes a miércoles y domingos, de 8:00 a 13 hrs.
- Jueves a sábado de 18 hrs. a 01am.
- Etiquetas: Gastronomía - Hotelería - Turismo